Un estimado de 10 mil viviendas ubicadas en la ciudad de Querétaro, tienen daños estructurales de nivel moderado a alto, a consecuencia del hundimiento que se registra en una zona de la capital estatal.

Las fallas geológicas Taxco- San Miguel y Tlacote, que cruzan la ciudad de Querétaro han causado una fosa tectónica, es decir, un desplazamiento de roca hacia abajo que dio lugar al valle de Querétaro, donde se asentó la población y se empezó a extraer agua para satisfacer necesidades básicas.

Omar Chávez Alegría, quien es coordinador de la carrera de Ingeniería Civil de la facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), realizó la investigación denominada ‘Predicción de fallas por subsidencia’.

En tal estudio – elaborado con el apoyo de cinco de sus estudiantes-se establece que la fosa tectónica formada por las fallas Taxco-San Miguel y Tlacote, generó una formación geológica irregular.

Aunado a esta situación, se ha mantenido constante la extracción de agua, lo que provocó un hundimiento, en el 2012, que ocasionó fisuras en la superficie.

Apenas la semana pasada se registró un hundimiento más, sobre los carriles centrales de la avenida 5 de Febrero, justo por donde pasa esta falla geológica, lo que provocó el cierre del tráfico vehicular por espacio de 12 horas además de la realización de trabajos de rellenado de la grieta.

Chávez Alegría explica en su estudio que las fisuras más notorias están en la avenida 5 de Febrero –una de las vialidades más transitadas de la capital del estado- y en la carretera a Tlacote, en donde las fallas primarias originan efectos secundarios paralelos a los existentes, con deformaciones de hasta 40 centímetros y una separación entre ellas que va de 50 a cien metros.

Hay áreas con deformaciones de hasta 1.20 metros, lo que excede la resistencia de la mampostería de una vivienda o edificio, que tolera un máximo de un centímetro por cada tres metros, refiere el investigador en su texto.

Lo referido por el universitario fue confirmado por el secretario de Desarrollo Urbano y Obras Públicas (SDUOP), Sergio Chufani Abarca.

Explicó que el problema es que ‘es una sola falla que va desde Corregidora, prácticamente se va hasta El Marqués. Entonces, donde va pasando desde 5 de febrero, lo que es la parte de Jardines de la Hacienda, Mansiones del Valle y del otro lado, pero casi cruza los tres municipios’.

Estas zonas, puntualizó el funcionario son factibles de tener un hundimiento ‘sobre todo aquellas donde cruza una alta concentración vehicular, donde cruzan y hay cargas dinámicas que generan este tipo de situaciones’.
No obstante lo anterior, el secretario afirmó que se realizará un estudio en la zona metropolitana de Querétaro para detectar los puntos donde pueden presentarse hundimientos.

Esta decisión se tomó luego de registrarse el hundimiento en la Avenida 5 de febrero, pues existe una falla geológica que cruza los municipios de Corregidora, Querétaro y El Marqués, la que aunada a la extracción de los mantos acuíferos, así como la concentración vehicular genera estos fenómenos.

Mientras se realiza tal estudio, se comprometió a realizar un monitoreo constante en los cruces, además de evaluarse algunas líneas de drenaje que pudieran estar obsoletas.

Trabajadores de las Comisiones estatales de Caminos y de Aguas, trabajaron para cubrir la zanja y reparar el pavimento.

Tierra de fallas

Desde el año 2000, investigadores adscritos al Instituto de Geología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), campus Juriquilla, confirmaron la existencia de dos sistemas de fallas regionales que se cruzan en tierras del Valle de Querétaro.

En la investigación denominada ‘El graben de Querétaro, México. Observaciones de fallamiento activo’, se establece que ‘el Valle de Querétaro se ubica en la intersección de dos sistemas de fallas regionales, cada uno con varias centenas de kilómetros de largo’.

Uno tiene una orientación norte-noroeste y es conocido como Sistema de Fallas Taxco-San Miguel de Allende; el otro tiene una orientación este-noreste y se le conoce como Sistema de Fallas Chapala-Tula.

‘Ambos sistemas se intersectan en una amplia franja que abarca al menos desde Huimilpan hasta Santa Rosa Jáuregui, y desde Apaseo El Alto, Guanajuato hasta Amazcala’.

De acuerdo a los investigadores de la UNAM, esta zona del estado de Querétaro es cruzada por unas 50 fallas de diversa extensión y profundidad.

Los riesgos potenciales

Por lo hasta ahora confirmado, el investigador de la UAQ, Omar Chávez Alegría consideró necesario ‘tomar en cuenta riesgos potenciales en las zonas de crecimiento antes de hacer una planeación urbana’.

Para contribuir a enfrentar esta situación, la máxima casa de estudios de la entidad asumió la decisión de dar seguimiento a la investigación y generará mayor vinculación con los organismos supervisores correspondientes, como es el caso de la secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas.

El objetivo de la investigación es conocer los asentamientos máximos o hundimientos y las posibles fallas secundarias, a fin de crear mapas de riesgo hasta el año 2015, además de proporcionar la información para que ellos la revisen para tomarlas en cuenta en el Plan de Desarrollo Urbano.

En la Av. 5 de Febrero –que cruza la ciudad de Querétaro de norte a sur- anualmente se registra un hundimiento de aproximadamente tres o cuatro centímetros, lo que provoca que se realicen trabajos de renivelación al menos tres ocasiones al año.

Para reparar el sitio, se coloca una placa de concreto, aunque el movimiento hace que se truene.

Por su parte, los investigadores geólogos de la UNAM, Gerardo de Jesús Aguirre, Ramón Zúñiga Dávila Madrid, Francisco Javier Pacheco Alvarado, Marco Guzmán y Jorge Nieto Obregón refieren que debido a esta situación ‘no se puede descartar la posibilidad de microsismicidad a lo largo de éstas (fallas), imperceptible para la población en lugares como la Avenida 5 de Febrero, con abundante tráfico de vehículos pesados, pero que sería registrada por un monitoreo sísmico sistemático’.

Refieren en sus conclusiones que falta realizar estudios geológicos y geofísicos en la ciudad de Querétaro ‘que permitan cuantificar el riesgo para la población y para la infraestructura urbana debido a las fallas de este lugar, y la influencia de éstas en el acuífero que abastece esta ciudad’.

vía Newsweek