Jorge, Rogelio y Jorge Efraín, se aferraron a la vida, ellos sufrieron insuficiencia renal crónica, una enfermedad que hizo que su vida diera un giro de 180 grados. José Rogelio, esperó 7 años para recibir un trasplante, fue el 28 de abril de este año cuando ingresó al quirófano, recibió una donación cadavérica de riñón. Jorge Efraín, tuvo dos motores para salir adelante con su enfermedad, su hija y su esposa Patricia, quien lo acompañó en todo momento, él también recibió un trasplante de riñón, el pasado 28 de abril…

Jorge recibió el mejor regalo el día de su cumpleaños, “el primero de mayo, mero el día de mi cumpleaños, un regalo que nunca me había esperado en mis 47 años nunca había recibido un regalo más maravilloso que la donación de un órgano y la verdad para mí fueron días de alegría, emoción, recuerdo que hasta lloré porque es volver a nacer”. El 1 de mayo fue trasplantado en el hospital de especialidades del Issstep, este maestro de profesión asegura que la donación de órganos, es la muestra de amor más grande que el ser humano puede hacer.

Este 15 de mayo Jorge, Rogelio y Jorge Efraín dejaron el hospital de especialidades del Issstep, ellos fueron  beneficiados con donaciones cadavéricas. Las familias de dos poblanos que se adelantaron en el camino, les dieron una segunda oportunidad de vida y sobre todo, decidieron que sus familiares siguieran viviendo a través de estas personas.