La Delegación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), a través de la Jefatura de Servicios de Salud en el Trabajo, Prestaciones Económicas y Sociales, organizó el Curso “Importancia de la Detección de Enfermedades Profesionales y Factores Psicosociales”, que se realizó en el Hospital General de Zona N° 1, de Tlaxcala, Tlax., magistralmente expuesto por el Dr. Manuel Carlos Ortega Álvarez, Jefe de Área de Enfermedades de Trabajo de nivel central.

El objetivo es identificar y detectar las Enfermedades de Trabajo por factores de riesgo más frecuentes, para promover  entre las y los trabajadores, la prevención de dichos factores, por lo que el Delegado del IMSS en Tlaxcala, Yamil Melgar, exhortó a dar un seguimiento puntual de cada uno de los factores de riesgo, para preservar la salud de las y los trabajadores asegurados.

Conocer las disposiciones relativas a esta materia, para que los centros de trabajo las observen y cumplan, creando y proveyendo las condiciones óptimas que permitan un espacio laboral y un entorno organizacional favorable para la preservación de la salud y el desempeño del trabajo, minimizando los riesgos e integridad física.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT), en el marco del Día Mundial de la Seguridad  y Salud en el Trabajo 2016, señaló que la atención de los factores de riesgo  psicosociales es un problema global que afecta a todos los países, a todas las profesiones y a todos los trabajadores.

En este contexto, el centro de trabajo es una fuente importante de riesgos psicosociales y al mismo tiempo el lugar idóneo para tratarlos, proteger la salud y el bienestar de los trabajadores.

Por ello es imprescindible atender la problemática derivada por la presencia de los factores de riesgo psicosocial en los centros de trabajo, ya que existe un estrecho vínculo entre la prevalencia de este tipo de factores de riesgo y el deterioro de la salud, de ahí la trascendencia de la prevención.

Prevención que parte del mismo trabajador, quien no debe faltar a su chequeo médico anual, en los casos que no se haya detectado alguna afectación profesional derivada del trabajo que realiza y en los casos que haya una enfermedad detectada, no suspender el tratamiento médico prescrito y cumplir con las medidas de seguridad, al realizar su trabajo.